viernes, 24 de agosto de 2007

Mutaciones

La realidad política nacional presenta un dinamismo como consecuencia de la acción de los candidatos en la actual campaña electoral. El principal efecto que se está logrando es la pérdida de la identidad de los partidos políticos, instituciones centrales en el sistema democrático para canalizar las voluntades públicas. La pregunta que subyace es, ¿qué se privilegia, las convicciones o la conveniencia política?
Desde el kirchnerismo se ha intentado varias fórmulas: en el primer año de gestión era la "transversalidad", un gran partido que superara las tradicionales estructuras de la U.C.R. y el P.J., para dar lugar a la incorporación de ciudadanos a la política que anteriormente no participaba; autodefiniendose como la "nueva política". Al no funcionar el mencionado proyecto, entre otras cuestiones por adherirse al peronismo clásico para ganar las elecciones legislativas del 2005, se buscó con la "Concertación plural" como el camino en el que actores con distintas ideologías definirían las estrategias comunes para el país a largo plazo. Si bien es cierto que sectores de varios partidos se acercaron al kirchnerismo, lo hicieron no tanto por el debate que éste permitía sino por los beneficios económicos que generaba la alianza. De hecho, el presidente y su esposa rechazan el diálogo con sectores disidentes, tanto con los legisladores en el Congreso como con los periodistas a los que no le concede entrevistas o conferencias de prensa.
En este contexto: ¿qué es el Frente para la Victoria?; ¿un conjunto de peronistas, radicales, socialistas, aristas disidentes o cooptados?; un poco de ambas cosas quuizás. Lo que si no queda definido son los principios fundamentales del partido, acaso la base de toda convergencia política.
¿Y qué es la Unión Cívica Radical?. Por un lado está el oficialismo, que por acción de Alfonsín y Morales decidieron encolumnar el partido tras la candidatura de Lavagna para la presidencia. Por otro lado, los "Radicales K", gobernadores e intendentes vinculados con Kirchner. Y un tercer sector que hasta hace un tiempo lideraba Margarita Stolbizer que se consideraba "Radical puro", porque pretendían candidato propio. Sin embargo, la última alianza de Stolbizer con Elisa Carrió terminó por demostrar que hoy la U.C.R. tiene varias versiones en la que es difícil reconocer cuál de sus políticos responde a la doctrina del centenario partido.
¿Y Afirmación para una República Igualitaria (ARI)?. El partido está en desacuerdo de la posibilidad de una coalición con López Murphy porque consideran que representa a la derecha argentina; sin embargo, su fundadora y candidata a Presidente, Elisa Carrió, dejó abierta dicha posibilidad bajo el argumento de una "gran Coalición Civica". No es la primera vez que ello ocurre, el antecedente inmediato fue la alianza política que Carrió decidió por fuera del partido con Telerman para las últimas elecciones para Jefe de Gobierno porteño.
¿Y Propuesta Republicana (PRO)?. ¿López Murphy va a ser su candidato o se va a bajar para aliarse con Carrió?. Macri dice que lo apoya pero "solo", dejando al resto de los partidarios en el país "en libertad" para elegir... ¿entonces para qué fue realizado este partido entre Recrear y Compromiso para el Cambio?. Parece que Macri se mueve en una política solitaria más que partidaria, sin olvidar los antecedentes de haber promovido personalmente aliar al PRO con Sobisch y Blumber, para luego deshacerse de ellos cuando políticamente tuvieron problemas en los casos "Fuentealba" y "el título de ingeniero", respectivamente.
La política nacional parece mutarse por voluntades y conveniencias personales de los candidatos, y los partidos políticos cambian al ritmo de sus principales actores. En esta coyuntura es complicado encontrar cuáles son las ideas comunes de los distintos proyectos de país que representan a una sociedad heterogénea en las voluntades de sus ciudadanos.